¿Qué hacer cuando el niño tiene una Rabieta?

Uno de los comportamientos más temidos por los padres y maestros son las rabietas. Suelen iniciarse después de que papá o mamá les niegue alguna cosa que quieren conseguir:

-Papá cómprame esa chuche.

– Hoy no puede ser Daniela….

Y estalla la tormenta. La Rabieta es básicamente una manera de llamar la atención, de reclamar que se nos haga caso, o una respuesta ante la frustración y una forma de alcanzar su objetivo. Se pasa mal porque la Rabieta suele suceder muchas veces en lugares públicos; el supermercado, la calle, en la puerta del colegio… la gente mira fijamente y tú no paras de imaginar que esas personas estarán pensando que eres un mal padre o madre que no sabe educar a sus hijos.

La única manera de que la Rabieta desaparezca, es ignorarla. Cuánto más caso le haces, más grande se convierte. Se trata de un trabajo duro, pero hay que ser fuertes y aguantar.

Consejillos para afrontar una rabieta:

      – Mantener la calma y pensar “Yo tengo el control de esta situación”.

      – No perder el control y enfadarnos o gritar ( aunque por dentro te mueras de ganas de hacerlo).

      – Decirle al niño/a: “ Mientras llores, grites y patalees, no te voy a hacer caso”.

      – Ignorar la rabieta ( siempre que no implique una autolesión).

      – Mantener cierta distancia física, situarnos en un lugar en el que podamos observar qué está haciendo el niño/a, pero que él o ella no perciban que estamos pendientes de lo que hace.

      – Tener mucha paciencia e ignorar a las personas que miran, ellas no conocen lo buena madre o padre que eres y que estás eligiendo lo mejor para tu hijo/a. No te importa su opinión.

      – Y sobre todo ser perseverantes, no rendirnos y en poco tiempo las rabietas desaparecerán.

Imagen

Anuncio publicitario

1 comentario en “¿Qué hacer cuando el niño tiene una Rabieta?

  1. Fundamental la paciencia, perseverancia y olvidarse de los demás… Hay etapas donde es imposible el dialogo porque son pequeños, pero el mensaje ha de ser unívoco porque si no, favoreces la repetición de esa conducta. Hay que dar tiempo para que el niño recupere su tranquilidad, manteniendo nosotros la nuestra.
    Un saludo! 😉

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s